5 razones por las ​que una cama para masajes de calidad es esencial para una buena experiencia de masaje

Cama para masajes

Altura

 

La altura de una cama para masajes dependerá de tu talla, si eres de estatura baja o alta. Pero, sobre todo, el tamaño dependerá de cómo quieres trabajar o el tipo de trabajo que realizarás.

Procura que la camilla esté en el rango de los 50 y los 95 centímetros de altura. Lo ideal es que la cama para masajes sea ajustable para facilitar tu trabajo como masajista.

Para comprobar si la altura de la cama para masajes se adecúa a tu cuerpo como para realizar un trabajo cómodo, ubícate de pie frente a esta con los brazos estirados y apoya los puños en la camilla, así notarás que es adecuada para realizar masajes en general. Procura que, si tú no estás cómodo haciendo tus masajes, no podrás brindar un servicio de calidad.

 

Estabilidad

 

La cama para masajes ya sea fija o portátil debe estar en relación según el uso que quieras darle. Muchos clientes prefieren visitas a domicilio que requieren de una camilla plegable, pero ten en cuenta que estos instrumentos son muy delicados.

Lo recomendable es trabajar principalmente con camas fijas, ya que son seguras y duraderas. Así, evitas inconvenientes que se puedan generar en un traslado. Una cama estable puede tener un cuerpo de madera o aluminio, resistente a la fuerza y tambaleos. También, procura fijarte que tu instrumento posea una alta capacidad de soporte, esto para evitar el deterioro de la cama si se aplica sobrepeso.

 

Diseño ergonómico

 

Definitivamente debes tener en cuenta que la contextura física de cada persona es diferente, entonces, al momento de seleccionar una cama para masajes tienes que pensar en potenciales clientes con diversas conformaciones y condiciones. Por ejemplo, las camillas normales pueden resultar incómodas para algunas personas mayores con cuerpo rígido, o cuando tienes visita de mujeres embarazadas, entonces, para su comodidad se requerirá de una camilla con orificios para los pechos y el abdomen. Por eso, es bueno que busques camas pensadas para que se adapten a todos los tipos de clientes.

 

Garantía

 

Si te dicen que es un producto de máxima calidad, tiene que ser así. Igualmente, siempre se debe cumplir la garantía del fabricante, ya que esto pone a prueba sus características. Esto es importante, ya que debes valorar la inversión que estás haciendo para adquirir el instrumento.

La camilla como un instrumento imprescindible para realizar tus masajes en una consulta independiente, tiene que tener una buena apariencia ante los ojos de cualquier persona, por lo tanto, una falta de garantía e incluso una mala mantención debe solucionarse inmediatamente, para así no tener efectos negativos en la atención y el cuidado.

 

Accesorios

 

Aunque no todas las camas para masajes vienen con variedad de accesorios disponibles, es indispensable contar con este valor agregado, que sin duda mejorarán tu servicio. Procura contar con los siguientes accesorios para tu camilla:

  • Brazos laterales de ampliación, que pueden extenderse para adaptarse a diversos tipos de cuerpos.
  • Soporte para cabezal facial articulado.
  • Cojines de cara y/o brazo.
  • Bandeja apoyabrazos colgante.
  • Funda de transporte.

 

 

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